Inicio2023-12-11T16:50:36+00:00

Periplo es un proyecto colaborativo que tiene el objetivo de contribuir a la creación de un sistema de migración laboral más equitativo en las cadenas de suministro de la industria agrícola en México y entre México y Estados Unidos, para proteger los derechos humanos de las y los trabajadores agrícolas migrantes.

¿Qué hacemos?

Promovemos el ejercicio de los derechos laborales de los trabajadores migrantes en la industria agrícola.

Trabajamos para fortalecer la capacidad de las organizaciones de trabajadores y las organizaciones de la sociedad civil (OSC) para apoyar a las y los trabajadores agrícolas migrantes durante todo el proceso de contratación y durante el empleo, para que conozcan sus derechos y cómo ejercerlos.

Promovemos la implementación de buenas prácticas del sector privado

Promocionamos buenas prácticas en el sector privado para que integren los más altos estándares laborales y compromisos con los derechos humanos tanto en sus procesos de reclutamiento como durante el empleo de las personas trabajadoras agrícolas temporales.

Promovemos espacios de diálogo, intercambio y colaboración.

Generamos alianzas, intercambio de experiencias de buenas prácticas y de información, y colaboraciones entre diversos actores para la mejora de prácticas en el reclutamiento y condiciones laborales, así como la formulación de recomendaciones en políticas públicas.

¿Cómo lo hacemos?

Las siguientes actividades incluidas en el plan de trabajo de Periplo se implementan con el apoyo y colaboración de las organizaciones de la sociedad civil e incluyen: 

¿Quiénes conformamos Periplo?

Periplo es un proyecto impulsado por Fundación Avina, implementado en colaboración con organizaciones de la sociedad civil nacionales e internacionales y financiado por la Fundación Walmart.

Impulsado por:

Impulsado por:

En colaboración con:

En colaboración con:

Con el financiamiento
de
:

Con el financiamiento de:

También contribuyen
con Periplo:

También contribuyen
con Periplo:

Nuestra razón de ser.

En México existen aproximadamente 2.5 millones de personas trabajadoras migrantes en la industria agrícola, quienes por lo regular migran de los estados del sur hacia el norte. Por otro lado, en 2019, el Departamento de Trabajo de Estados Unidos certificó 257,667 puestos de trabajo con visas H-2A, las cuales permiten a personas migrantes trabajar de manera temporal en la industria agrícola en Estados Unidos.   

Cerca del 75% de estas visas fueron emitidas a trabajadores y trabajadoras mexicanas. En ocasiones las personas trabajadoras que obtienen estas visas, deben pagar altas cuotas y gastos de viaje hacia Estados Unidos, dejándolos endeudados antes de comenzar a trabajar. Las y los trabajadores agrícolas migrantes en México también forman parte de la cadena de suministro transnacional; el 60% de las exportaciones agrícolas de México tienen como destino los Estados Unidos de Norteamérica. 

La movilidad laboral en ambos contextos conlleva un precio para las y los trabajadores agrícolas migrantes  y para el sector privado si no existe una regulación adecuada. 

Recientemente, las organizaciones que forman parte de Periplo han documentado un número preocupante de casos de explotación de trabajadores agrícolas migrantes, discriminación durante el proceso de reclutamiento, cobro de cuotas indebidas por parte de reclutadores, falta de pago de un salario digno o retención de pagos, falta de prestaciones sociales, acceso a servicios de salud, vivienda digna o incluso abusos y malos tratos por parte de los empleadores. 

El proyecto tiene un enfoque particular en las mujeres, que componen alrededor de un tercio de la fuerza laboral agrícola migrante en los Estados Unidos. En el 2020 en México, de las 2 millones 330 mil 305 personas que laboraron como jornaleras agrícolas, el 12.7% fueron mujeres. Son ellas quienes enfrentan mayores dificultades, ya que a menudo son objeto de acoso sexual por parte de supervisores, empleadores y otros en posiciones de poder.

La crisis sanitaria del COVID-19, hizo evidente la importancia del sector agrícola para las economías tanto de México como de Estados Unidos. La pandemia, sin embargo, ha puesto de relieve las condiciones de trabajo desiguales del sector.  

A pesar de que están clasificados como trabajadores esencialeslas y los trabajadores agrícolas migrantes a menudo están empleados precariamente y continuaron trabajando aún bajo condiciones de alto riesgo para su salud y la de sus familias. En México, los trabajadores agrícolas migrantes incluso han sido excluidos de la Campaña Nacional de Vacunación del gobierno, porque se mueven continuamente o carecen de la documentación requerida. 

¿Qué actividades e hitos han tenido las organizaciones en el marco del proyecto?

Capacitaciones realizadas en México y EEUU

A MÁS DE 4.000

personas trabajadoras migrantes agrícolas.

A MÁS DE 1.000

personas trabajadoras contratadas a través de procesos de reclutamiento responsable.

Recolección de información y producción de conocimiento sobre la industria a través de

INFORMES
Y DIAGNÓSTICOS

ESPACIOS
MULTI-ACTOR

creados como la Comunidad de Práctica sobre Debida Diligencia en Derechos Humanos: que fomenta la relación entre empresas y OSC.

Generación de

CONOCIMIENTO
Y HERRAMIENTAS

que promueven buenas prácticas en el reclutamiento y empleo de personas trabajadoras migrantes agrícolas.

Descarga el material que ponemos a disposición:

Prensa

Organizaciones se reunen en Washington y definen colaborar en la Comunidad de Aprendizaje sobre trabajo agrícola en los corredores de Norteamérica

El pasado 2 y 3 de noviembre, se llevó a cabo un encuentro de intercambio de experiencias sobre trabajo agrícola entre las organizaciones que participan dentro del portafolio de Fundación Walmart y que han desarrollado e implementado una diversidad de metodologías y herramientas para generar cambios sistémicos dentro del sector.      

noviembre 16th, 2023|Categories: PRENSA|

Participación, información y reparación en el centro del diálogo regional sobre debida diligencia en el sector agrícola

17 de octubre 2023.- El cambio de un modelo voluntario de responsabilidad social empresarial a uno de debida diligencia en derechos humanos se vuelve urgente para prevenir y reparar los abusos que han afectado a personas trabajadoras y comunidades y paralelamente asegurar una mayor rentabilidad para el sector privado. La debida diligencia permite asegurar ciclos de gestión proactiva de riesgos reales y potenciales de los efectos adversos en los derechos humanos. 

octubre 17th, 2023|Categories: PRENSA|

Contacto

    Image Credits: Toumani Camara”.

    Go to Top